¡¡¡ Al fin estoy en mi residencia ¡!!
El único pequeño inconveniente: que por llegar el sábado
tengo que quedarme dos días en una habitación individual que no será la mía.
Hasta aquí, os diréis, pues qué quejica, tampoco pasa nada…pero es que resulta
que ¡¡No tiene ducha!!
Por
increíble que parezca, cuando llegué aquí esta mañana ni siquiera me di cuenta
de que faltaba. Entré al cuarto de baño, y es cierto que algo raro noté…pero no
supe saber qué.
Acabo de
pedirle a una chica que salía de su habitación, que por grandísima suerte
hablaba polaco, que si podía preguntarle a la malas pulgas de la recepción
dónde se supone que tengo que ducharme, o si pretenden que me quede en este
limbo hasta el lunes. Pues resulta ser la segunda opción, la señora de recepción
ha vuelto a repetir que esta habitación es solo hasta el lunes y básicamente
que aguante…
Justo antes
de llegar a la residencia le comentaba a mi mentor ( a partir de ahora, mi
salvador, siempre me soluciona mis
problemas y dudas (muchas) ) que no suele acompañarme la buena suerte, es más,
cuando algo puede salirme mal, lo más probable es que me salga mal (véase que
siempre me toca estar en listas de espera, siempre se borra mi nombre de los
sitios…). Él no se lo creía, hasta que hemos llegado y ha tenido que darme la
razón.
Sinceramente,
no he entendido el por qué de quedarme en esta habitación-limbo. Al principio
me dio el número de mi habitación definitiva (en la que habrá ducha y cocina y
compañera) pero estaba cerrada y el paradero de la llave solo se descubrirá el
lunes… Donde están las llaves
matarile-rile-rile…
Esta tarde
tenía pensado cotillear alrededor de la
residencia, para hacerme con mi barrio y mis tiendecitas de aquí (por el
momento solo sé que hay un mini Carrefour, una biblioteca y un monumento al
levantamiento de Varsovia)…pero hace un día de perros y ya he estado fuera todo
el día. Hoy hemos comido típicos piroguis en Nowy Świat (una de las
principales calles) y después de una larga sobremesa internacional, cada
mochuelo se ha ido a su olivo…hasta esta noche.
He hablado
con mis papix y les he hecho un resumen de todo. Hasta ahora tampoco había
tenido realmente tiempo de recapitular (en el hostal siempre había gente con
quien hablar y los cuartos no solían estar muy en calma). La verdad es que se
han disipado todos los temores que tenía antes de venir. Mi timidez se ha
esfumado sorprendentemente y me encuentro muy muy a gusto con la gente que
estoy conociendo y de la que estoy aprendiendo. Seguramente sea por lo que dice
la mallorquina M. : venimos todos en cierto modo solos y tenemos un nexo común,
así que enseguida tenemos algo de lo que hablar. A todos nos asusta alguna de
las vertientes de la soledad (tal vez la peor sea la de sentirse solo rodeado de gente) así que
resulta reconfortante que alguien te de conversación.
Estoy
aprendiendo muchísimo de Italia, Polonia y Eslovaquia estos días: tradiciones,
hábitos, música…contadas por sus propios habitantes. Iré ampliando la lista de
países, por supuesto!
Mañana
iremos a ver una carrera de coches hechos a mano. Tiene bastante buena pinta.
De todas formas, siempre hay algo que hacer. Acabo de descubrir que en la
página del ESN (red de estudiantes Erasmus) organizan algunas actividades
durante la semana. A lo que seguro me uno es a subir al Palacio de la Cultura
(“El Edificio” pa’ entendernos) para tener una panorámica de la ciudad.
Mañana
vendrá una amiga de mi mentor C. a la que conocí el otro día de cervecillas.
Como está aprendiendo castellano, puede practicar conmigo y a la vez yo hablaré
inglés y polaco. Está muy bien porque así empiezo a salir con gente de aquí,
que conoce los sitios de aquí y no solo los sitios Erasmus o de turisteo.
Al parecer
el bario de Praga es como el Soho o el Montmatre Varsoviano…veremos qué tal.
También hay que cotillear los bares de Jazz en vivo, que es una música muy
extendida por aquí. Me huele que Varsovia es una ciudad bastante cultureta, así
que creo que seremos buenas amigas.
El otro día,
tras un largo paseo, comprobé que resulta difícil definir esta ciudad, porque
puedes encontrar tanto enormes avenidas bordeadas por edificios altos y grises,
tanto callejuelas estrechitas con casas neoclásicas pintadas de colores. Por un
lado cemento, por el otro enormes parques con árboles infinitos (el parque Lazienki
es alucinante, parece un bosque). Rigidez soviética conviviendo con terracitas
repletas de flores y velas. (nota mental, comprar una macetita de lavanda para
el cuarto definitivo).
En fin, voy
a seguir cotilleando las ingentes cantidades de fotos que voy acumulando.
Desharía la maleta y me pondría el cuarto a mi gusto, pero eso deberá esperar
al lunes…igual que la ducha! (ahora en
serio, mañana voy a pedir mediante señas, morse o lo que sea que me deje entrar
en otra habitación a ducharme)
Do witzenia!
pd. a la habitación también le faltaba otro pequeño detalle.....internet... así que pongo esto hoy lunes (después de estudiar un máster para poder conectar este trasto) en vez de el sábado que fue cuando lo escribí!
No hay comentarios:
Publicar un comentario