domingo, 2 de septiembre de 2012

Entrada namber chú : maleta y recetas


Pues estos días, he ido a entregar más papelajos a la oficina de relaciones internacionales de la universidad y de paso, pues me he comprado una silkepil y he mirado maletones.
Y ahora es cuando pensáis, uy uy que aquí esta loca se va a poner a contar su vida al detalle…pero no, no, que todo tiene un sentido: y es que al planear una aventura tan larga, se plantean cosas que antes ni se te hubieran ocurrido. Una de ellas es la odisea de entrar en un supermercado en el que tooodo está escrito en otro idioma. Me veo capaz de echarme mantequilla de cacahuete en las piernas pensando que es cera caliente…


En fin, para evitar episodios como ese, y porque tampoco me apetece ir cual Chewbacca  por Varsovia, me he comprado ese aparatito tan  molongui, del que, si me has visto uno de estos días, seguro que te he hablado.

Y sobre pequeños electrodomésticos charlaba el otro día con mi amiga P. Ella pretende llevarse secador, plancha y yo creo que hasta si le dejan, la batidora y la tostadora, que nunca se sabe.
Son dilemillas, que, por lo que he podido comprobar, surgen a todo futuro Erasmus: hay días en los que te planteas meter todo y más en la maleta, aún en contra de las leyes de la física…y otros te da por ser minimalista, “cuatro cosas y el resto lo compro allí”.
En mi caso, tengo suerte, puedo llevar 32 kg más los 10 de la maleta de mano…así que medio armario se viene conmigo. El abrigo, dice una chica polaca que mejor comprarlo allí, que hay más variedad. Le haré caso, básicamente porque aquí en Valencia uso la técnica de la cebolla y no tengo.
De todas formas, existen compañías de envío de cajas y maletas, así que si de repente echas de menos algún jersey, algunos zapatos o simplemente algo de jamoncito del güeno, puedes pedir que te lo manden desde casita hasta donde estés.

Otro tema que me sofoca (soy de sofoco fácil) es el de la comida. El tiempo que he estado viviendo sola no he caído enferma más veces porque si no se solaparían las enfermedades…y resulta que ha sido por no llevar una dieta equilibrada. ¡Pero esta vez no me pasa! Voy a estudiarme todos los libros posibles de nutrición y a prepararme un buen librito de recetas. Sí, da bastante pereza ponerse a cocinar algo elaborado, pero merece la pena. Así que, a ello me pondré…a no ser que encuentre algún compañero de piso cocinillas (mi gran salvación) e intercambie las tareas de chef por las de friega-platos.
Si a alguien se le ocurre alguna recetilla buena, bonita y barata, que me lo haga saber, que me la apunto!



Por el momento, esas son las preocupacioncillas que tengo…
Mañana me haré el carnet de estudiante internacional, para tener descuentos por Polonia y demás países que tengo intención de visitar. Para aquellas personillas que vayáis a venir a verme, se saca en el IVAJ.
El permiso de residencia lo gestionaré una vez en Varsovia, y también lo de la tarjeta de móvil y la cuenta en el banco.

Pero bueno, tengo los quehaceres apuntaditos en una de mis queridas listas, así que wszystkich kontrolowanych!  (todo controlado!)

2 comentarios:

  1. Meeeeeeee alucina el blog! Lo escrito, los colores, los dibujos, el título... ¡¡Me alucinas tú!! Ya tienes otra seguidora, primi :)

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  2. Ooh! Viniendo de la gran bloguera de una-zarigüeya-más...que además es mi super-primi, es tooodo un honor !! (:
    Loviú!

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